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En la puja por Heurtel
El Caja Laboral quiere ceder al base francés, por el que están muy interesado el Fuenlabrada y también el club sevillano.
Lento y
pesado está siendo el verano para el Cajasol. Alguno en la oficina del
club, de hecho, no se ha pillado vacaciones ni se espera que lo haga
pronto. La formación del nuevo consejo de administración tras la llegada
de Caixabank, la larga negociación con Joan Plaza, el posterior acuerdo
con Aíto García Reneses, las valoraciones respecto a la conveniencia o
no de renovar a Txemi Urtasun y a Earl Calloway, la incorporación de
John Holland... Todos éstos han sido los pasos que ha ido dando el club
en los dos últimos meses, incluso una mejora de contrato para Tomas
Satoransky, que disfrutará aquí de su cuarta campaña en la ACB antes de
dar el salto a la NBA, y también las confirmaciones de que Ondrej Balvin
y Beka Burjanadze integrarán la primera plantilla.
Está el club sevillano moviéndose con paciencia para redondear la plantilla con dos jugadores que satisfagan las peticiones del entrenador madrileño. Los tiros están centrados en ese interior que potencie el juego por dentro y que puede desenvolverse en dos posiciones para compartir minutos con Luka Bogdanovic y también con Triguero, además de con Balvin, por supuesto. El primer candidato se le va de presupuesto al Cajasol, que continúa en el proceso de selección, aunque sin dar de lado el otro lugar que necesita reforzar: otra plaza exterior. Quieren en San Pablo un base que pueda hacer de escolta o al contrario. Uno de los jugadores que gusta a Juan Llaneza y a Aíto García Reneses es Thomas Heurtel, el director de juego que firmó cuatro campañas el pasado verano en el Caja Laboral, pero que no cuenta con la confianza de Dusko Ivanovic. El técnico baskonista le comunicó hace tiempo al presidente, Josean Querejeta, que el galo no estará en el proyecto el curso venidero. Y no estará.
El Cajasol es uno de los clubes que se ha interesado por la situación de Heurtel, quien tuvo un buen debut el año anterior en la ACB en el Lucentum Alicante, llamando la atención del Caja Laboral, que lo fichó con un contrato jugoso y cuatrienal. Pasa que la entidad hispalense no es la única que se ha fijado en el base. De hecho, el Fuenlabrada, conocedor de la situación, se ha dirigido al agente del jugador para incorporarlo, pero en Vitoria quieren que suba la oferta para compartir la ficha, más o menos el mismo argumento que utiliza el club baskonista con el Cajasol. El conjunto madrileño ha dado un ultimátum al Caja Laboral para que no se le escape una segunda opción que maneja, algo que iría en beneficio de los hispalenses.
Está el club sevillano moviéndose con paciencia para redondear la plantilla con dos jugadores que satisfagan las peticiones del entrenador madrileño. Los tiros están centrados en ese interior que potencie el juego por dentro y que puede desenvolverse en dos posiciones para compartir minutos con Luka Bogdanovic y también con Triguero, además de con Balvin, por supuesto. El primer candidato se le va de presupuesto al Cajasol, que continúa en el proceso de selección, aunque sin dar de lado el otro lugar que necesita reforzar: otra plaza exterior. Quieren en San Pablo un base que pueda hacer de escolta o al contrario. Uno de los jugadores que gusta a Juan Llaneza y a Aíto García Reneses es Thomas Heurtel, el director de juego que firmó cuatro campañas el pasado verano en el Caja Laboral, pero que no cuenta con la confianza de Dusko Ivanovic. El técnico baskonista le comunicó hace tiempo al presidente, Josean Querejeta, que el galo no estará en el proyecto el curso venidero. Y no estará.
El Cajasol es uno de los clubes que se ha interesado por la situación de Heurtel, quien tuvo un buen debut el año anterior en la ACB en el Lucentum Alicante, llamando la atención del Caja Laboral, que lo fichó con un contrato jugoso y cuatrienal. Pasa que la entidad hispalense no es la única que se ha fijado en el base. De hecho, el Fuenlabrada, conocedor de la situación, se ha dirigido al agente del jugador para incorporarlo, pero en Vitoria quieren que suba la oferta para compartir la ficha, más o menos el mismo argumento que utiliza el club baskonista con el Cajasol. El conjunto madrileño ha dado un ultimátum al Caja Laboral para que no se le escape una segunda opción que maneja, algo que iría en beneficio de los hispalenses.
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